Los propietarios han notado unas manchas negras en sus ojos desde hace unos meses. La conformación anatómica de esta raza predispone a esta enfermedad: el pliegue nasal prominente, la inversión del párpado inferior y la excesiva apertura de la fisura palpebral, originan una irritación crónica de la córnea y una mayor evaporación de la lágrima.
La intervención quirúrgica precoz nos permite adaptar la fisura palpebral al diámetro corneal y corregir el entropión. Asociando un tratamiento médico conseguimos reducir la invasión de melanina en la córnea y mejorar la capacidad visual.
Paciente cinco meses después de la intervención quirúrgica.